Si crees que eres malo en inglés, deberías leer esto:

A menudo escuchamos en la academia aquello de “es que soy muy malo en inglés”. Lo dicen muchos alumnos a modo de excusa cuando algo les sale mal en inglés. Es como decir “por eso no lo he aprendido nunca y no lo voy a aprender tampoco”. Ellos mismos se han puesto esta etiqueta de “soy malo en inglés”, lo que les ha condicionado en el pasado, pero que, lamentablemente, también les condiciona en el futuro.
Pero es normal. Todos nos ponemos etiquetas a lo largo de nuestra vida. Unos dicen que son guapos, otros feos. Habrá introvertidos y extrovertidos. Listos y tontos. Buenos futbolistas y torpes con cualquier deporte. Entonces, es normal que también haya gente que es buena en inglés y otra que es mala. ¿Qué fácil no? Dividir el mundo en buenos y malos.
Ahora, lo bueno del ser humano es que es un ser vivo y, como tal, puede cambiar. Sí, lo oyes bien… Puede cambiar. Entonces, ¿También puedo cambiar malo en inglés por bueno en inglés? Sí, también. Tú eliges la etiqueta que te quieres poner.
En los años 70 hubo un chaval en los EE.UU. que quería jugar al baloncesto. Cuando terminó su primer entrenamiento, el entrenador le dijo que él no valía para ese deporte, que mejor se dedicara a otra cosa. Sin embargo, ese chaval no “compró” aquella etiqueta y empezó a trabajar duro. Más duro que cualquier otro chico de su edad. Entrenaba día sí y otro también. Horas y horas botando el balón y practicando. ¿El nombre del chaval? Michael Jordan. Resulta que aquel chaval “no apto para el baloncesto” se convirtió en el mejor jugador de la historia y, según dicen, uno de los más grandes deportistas de todos los tiempos. Y todo porque no se creyó la etiqueta que aquel entrenador le quiso poner.
Cuando, en las sesiones de Coaching en la academia, los alumnos dicen que son malos en inglés, les pregunto “¿Desde cuando?”. Poco a poco descubrimos que alguien en algún momento les puso esa etiqueta y que ellos le creyeron. Es normal. La persona que les puso la etiqueta normalmente ha sido un profesor. Y, cuando estamos en el colegio, el profesor es una persona “que lo sabe todo”, así que, si dice que eres malo en inglés, ¿Tú que crees? Pues claro, que eres malo en inglés.
Pero estas a tiempo de cambiarlo. Tú eliges la etiqueta que te quieres poner. Tú eliges si quieres ser bueno en inglés. Y nosotros podemos ayudarte en esa elección.